Uso del punto y coma
El punto y coma (;) indica una pausa superior a la marcada por la coma e inferior a la señalada por el punto.
Para darte una idea de la duración de la pausa, consulta en esta sección “Guía gráfica del comportamiento tonal y de la duración de las pausas, de acuerdo con los signos”.
Por lo pronto, toma como pista lo siguiente: imagina cuánto duran dos chasquidos de dedos o dos palmadas, y tendrás una idea de la duración del punto y coma.
Se utiliza en los siguientes casos:
· Para separar los elementos de una enumeración cuando se trata de expresiones complejas que incluyen comas. Ejemplos:
La chaqueta es azul; los pantalones, grises; la camisa, blanca; y el abrigo, negro.
Cada uno de los grupos de trabajo preparará un taller: el primer grupo, el de cerámica; el segundo, el de telares; el tercero, el de cestería.
· Para separar proposiciones yuxtapuestas, especialmente cuando en estas se ha empleado la coma. Ejemplos:
Era necesario que el hospital permaneciese abierto toda la noche; hubo que establecer turnos.
La muchacha, gozosa, corría hacia su casa; sus padres acababan de llegar.
La situación económica de la empresa, agravada en los últimos tiempos, era preocupante; se imponía una acción rápida y contundente, si se deseaba salvar los puestos de trabajo.
A las cinco de la madrugada aún había luz en su habitación; seguramente, se había quedado dormido leyendo.
· En muchos de estos casos, se podría optar por separar los períodos con punto y seguido. La elección del punto y seguido o del punto y coma depende de la vinculación semántica que exista entre las oraciones o proposiciones. Si el vínculo es débil, se prefiere usar un punto y seguido; mientras que, si es más sólido, es conveniente optar por el punto o coma.
· También sería posible separar los mencionados períodos con dos puntos, puesto que casi siempre subyacen las mismas relaciones expresadas en el tema de los dos puntos (:).
· Se suele colocar punto y coma, en vez de coma, delante de conjunciones o locuciones conjuntivas como estas: “pero”, “mas” y “aunque”, “así como”, “sin embargo”, “por tanto”, “por consiguiente”, “en fin”, etcétera, cuando los períodos tienen cierta longitud y encabezan la proposición a la que afectan. Ejemplos:
Su discurso estuvo muy bien construido y fundamentado; pero no consiguió convencer a muchos de los participantes en el Congreso.
Las últimas pruebas de imprenta parecen muy limpias; por tanto, creo que no tardaré mucho en revisarlas y devolverlas.
· Si los bloques no son muy largos, se prefiere la coma. Ejemplos:
Vendrá, pero tarde.
Lo hizo, aunque de mala gana.
· Si los períodos tienen una longitud considerable, es mejor separarlos con punto y seguido. Por ejemplo:
Este verano, varios vecinos del inmueble tienen previsto poner en venta sus respectivas viviendas. Por consiguiente, son previsibles numerosas visitas de posibles compradores.